Descripcion
El Lotus T125, lanzado inicialmente en 2010, es un vehículo de alto rendimiento concebido para emular la experiencia de conducir un monoplaza de Fórmula 1, pero accesible para entusiastas adinerados. Esta máquina es parte de un proyecto ambicioso de Lotus para acercar la tecnología de los circuitos a clientes privados, ofreciendo un producto que combina la ingeniería de competición con la posibilidad de ser disfrutado en eventos privados y circuitos cerrados.
Dotado de un motor V8 de 3.5 litros de origen Cosworth, el T125 es capaz de generar aproximadamente 640 caballos de fuerza. Este propulsor está acoplado a una caja de cambios secuencial de seis velocidades, optimizada para ofrecer cambios rápidos y precisos, similares a los de un monoplaza de carreras. La construcción del chasis es de fibra de carbono, lo que asegura una estructura ligera y resistente, fundamental para obtener un rendimiento óptimo en pista.
El Lotus T125 no tuvo una producción prolongada, limitándose a un pequeño número de unidades fabricadas entre 2010 y 2011. Este coche se presentó como parte del programa Lotus Exos, que incluía formación y soporte técnico para sus propietarios, permitiéndoles experimentar las sensaciones de un piloto profesional.
En términos de diseño, el T125 adopta una estética puramente inspirada en la Fórmula 1, con un alerón delantero pronunciado, aerodinámica avanzada y una cabina abierta que refuerza la experiencia de conducción extrema.
Aunque el T125 no fue un modelo destinado a la competición oficial y, por tanto, no acumuló premios en circuitos, su importancia radica en su exclusividad y en la posibilidad de ofrecer una experiencia cercana a la de un coche de carreras a un selecto grupo de entusiastas. Esta propuesta innovadora de Lotus consolidó su reputación como fabricante audaz y vanguardista en el desarrollo de vehículos deportivos de altas prestaciones.
Dotado de un motor V8 de 3.5 litros de origen Cosworth, el T125 es capaz de generar aproximadamente 640 caballos de fuerza. Este propulsor está acoplado a una caja de cambios secuencial de seis velocidades, optimizada para ofrecer cambios rápidos y precisos, similares a los de un monoplaza de carreras. La construcción del chasis es de fibra de carbono, lo que asegura una estructura ligera y resistente, fundamental para obtener un rendimiento óptimo en pista.
El Lotus T125 no tuvo una producción prolongada, limitándose a un pequeño número de unidades fabricadas entre 2010 y 2011. Este coche se presentó como parte del programa Lotus Exos, que incluía formación y soporte técnico para sus propietarios, permitiéndoles experimentar las sensaciones de un piloto profesional.
En términos de diseño, el T125 adopta una estética puramente inspirada en la Fórmula 1, con un alerón delantero pronunciado, aerodinámica avanzada y una cabina abierta que refuerza la experiencia de conducción extrema.
Aunque el T125 no fue un modelo destinado a la competición oficial y, por tanto, no acumuló premios en circuitos, su importancia radica en su exclusividad y en la posibilidad de ofrecer una experiencia cercana a la de un coche de carreras a un selecto grupo de entusiastas. Esta propuesta innovadora de Lotus consolidó su reputación como fabricante audaz y vanguardista en el desarrollo de vehículos deportivos de altas prestaciones.