Lotus Eleven
Id marca:
38
Anyo inicio:
1956
Anyo fin:
1958
Descripcion
El Lotus Eleven, lanzado inicialmente en 1956 y producido hasta 1958, es un vehículo icónico en la historia de la marca británica Lotus, conocido por su diseño aerodinámico y su destacada participación en competiciones automovilísticas. Este modelo fue concebido por el fundador de Lotus, Colin Chapman, quien buscaba crear un coche de competición que combinara ligereza, eficiencia y rendimiento superior en circuitos.
El Eleven se produjo en varias versiones, incluidas la versión Club, Sport y Le Mans, cada una diseñada para maximizar el rendimiento en diferentes contextos de carreras. La versión Le Mans, en particular, está especialmente optimizada para carreras de resistencia, con mejoras en los frenos y el sistema de refrigeración.
Desde un punto de vista técnico, el Lotus Eleven destaca por su chasis tubular de acero y su carrocería de aluminio, que le conferían un peso extremadamente bajo, mejorando así su maniobrabilidad y velocidad. Equipado con motores Coventry Climax de cuatro cilindros, el Eleven ofrecía diferentes configuraciones de potencia, ajustándose a las necesidades específicas de sus usuarios.
En términos de importancia en el mercado, el Lotus Eleven tuvo un impacto significativo en el automovilismo de su época. Logró numerosos éxitos en diversas competiciones, incluyendo una destacada victoria en su clase en las 24 Horas de Le Mans en 1957. Este modelo no solo consolidó la reputación de Lotus como fabricante de coches de competición de alto rendimiento, sino que también influyó en el diseño de futuros modelos de la marca.
El legado del Lotus Eleven perdura como un símbolo de innovación y excelencia en ingeniería automotriz, habiendo dejado una huella indeleble en el panorama de las carreras de la década de 1950.
El Eleven se produjo en varias versiones, incluidas la versión Club, Sport y Le Mans, cada una diseñada para maximizar el rendimiento en diferentes contextos de carreras. La versión Le Mans, en particular, está especialmente optimizada para carreras de resistencia, con mejoras en los frenos y el sistema de refrigeración.
Desde un punto de vista técnico, el Lotus Eleven destaca por su chasis tubular de acero y su carrocería de aluminio, que le conferían un peso extremadamente bajo, mejorando así su maniobrabilidad y velocidad. Equipado con motores Coventry Climax de cuatro cilindros, el Eleven ofrecía diferentes configuraciones de potencia, ajustándose a las necesidades específicas de sus usuarios.
En términos de importancia en el mercado, el Lotus Eleven tuvo un impacto significativo en el automovilismo de su época. Logró numerosos éxitos en diversas competiciones, incluyendo una destacada victoria en su clase en las 24 Horas de Le Mans en 1957. Este modelo no solo consolidó la reputación de Lotus como fabricante de coches de competición de alto rendimiento, sino que también influyó en el diseño de futuros modelos de la marca.
El legado del Lotus Eleven perdura como un símbolo de innovación y excelencia en ingeniería automotriz, habiendo dejado una huella indeleble en el panorama de las carreras de la década de 1950.