Koenigsegg CCR
Id marca:
37
Anyo inicio:
2004
Anyo fin:
2006
Descripcion
El Koenigsegg CCR es un superdeportivo de alto rendimiento lanzado por la marca sueca Koenigsegg en 2004, con una producción que se extendió hasta 2006. Este modelo es un sucesor directo del Koenigsegg CC8S y representa un avance significativo en términos de diseño y rendimiento dentro de la joven pero innovadora empresa automotriz.
El CCR se construyó sobre la base del chasis de fibra de carbono y aluminio que caracterizaba a los modelos de Koenigsegg, garantizando una estructura extremadamente ligera y robusta. Bajo su capó, el CCR estaba equipado con un motor V8 de 4.7 litros, sobrealimentado por dos supercargadores Rotrex, capaz de generar hasta 806 CV y 920 Nm de par motor. Este impresionante motor permitía al CCR acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 3.2 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 388 km/h, lo que en su momento le permitió ostentar brevemente el récord mundial de velocidad para un coche de producción.
El diseño aerodinámico del CCR, con sus puertas de apertura en tijera y su carrocería de líneas fluidas, no solo capturaba la esencia de un superdeportivo moderno, sino que también mejoraba la eficiencia aerodinámica. En el interior, el CCR ofrecía un entorno minimalista y enfocado en el conductor, con materiales de alta calidad y tecnología avanzada para su época.
En términos de su legado, el Koenigsegg CCR fue un paso crucial para la marca, consolidando su reputación como fabricante de algunos de los coches más rápidos y avanzados del mundo. Aunque su producción fue limitada, el CCR sentó las bases para futuros modelos de Koenigsegg, estableciendo estándares de innovación y rendimiento que continúan hasta hoy.
El CCR se construyó sobre la base del chasis de fibra de carbono y aluminio que caracterizaba a los modelos de Koenigsegg, garantizando una estructura extremadamente ligera y robusta. Bajo su capó, el CCR estaba equipado con un motor V8 de 4.7 litros, sobrealimentado por dos supercargadores Rotrex, capaz de generar hasta 806 CV y 920 Nm de par motor. Este impresionante motor permitía al CCR acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 3.2 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 388 km/h, lo que en su momento le permitió ostentar brevemente el récord mundial de velocidad para un coche de producción.
El diseño aerodinámico del CCR, con sus puertas de apertura en tijera y su carrocería de líneas fluidas, no solo capturaba la esencia de un superdeportivo moderno, sino que también mejoraba la eficiencia aerodinámica. En el interior, el CCR ofrecía un entorno minimalista y enfocado en el conductor, con materiales de alta calidad y tecnología avanzada para su época.
En términos de su legado, el Koenigsegg CCR fue un paso crucial para la marca, consolidando su reputación como fabricante de algunos de los coches más rápidos y avanzados del mundo. Aunque su producción fue limitada, el CCR sentó las bases para futuros modelos de Koenigsegg, estableciendo estándares de innovación y rendimiento que continúan hasta hoy.