Descripcion
El Peugeot 104, lanzado en 1972, representa un hito en la historia de Peugeot como uno de los primeros automóviles compactos de la marca francesa. Este modelo fue diseñado por Paolo Martin para Pininfarina y rápidamente se distinguió por su enfoque innovador hacia la eficiencia urbana y la versatilidad. Con una longitud de solo 3,58 metros, el 104 fue en su momento el coche de cuatro puertas más corto del mundo, una característica que lo hizo ideal para la conducción en ciudades.
El Peugeot 104 se produjo hasta 1988 y durante su vida útil experimentó varias actualizaciones, aunque se mantuvo fiel a su diseño original. El modelo fue inicialmente lanzado como un sedán de cuatro puertas, pero en 1974 se añadió una versión de tres puertas, ampliando su atractivo en el mercado de los coches compactos.
Desde el punto de vista técnico, el 104 estaba equipado con un motor transversal de cuatro cilindros, diseñado en colaboración con Renault, que se ofrecía en diferentes cilindradas, comenzando con 954 cc y aumentando hasta 1.360 cc en versiones posteriores. Este motor fue reconocido por su eficiencia y fiabilidad, características que contribuyeron a la popularidad del modelo.
El Peugeot 104 no solo jugó un papel crucial en la expansión de Peugeot en el segmento de automóviles compactos, sino que también sentó las bases para futuros modelos exitosos como el Peugeot 205. Aunque no fue un coche que acumulase numerosos premios, su impacto se mide mejor en términos de ventas y la huella que dejó en el mercado europeo durante los años 70 y 80.
El modelo es recordado por su robustez, simplicidad y por ser un precursor en la adopción del motor transversal en un coche de tracción delantera, una configuración que se ha convertido en estándar en el diseño de automóviles compactos.
El Peugeot 104 se produjo hasta 1988 y durante su vida útil experimentó varias actualizaciones, aunque se mantuvo fiel a su diseño original. El modelo fue inicialmente lanzado como un sedán de cuatro puertas, pero en 1974 se añadió una versión de tres puertas, ampliando su atractivo en el mercado de los coches compactos.
Desde el punto de vista técnico, el 104 estaba equipado con un motor transversal de cuatro cilindros, diseñado en colaboración con Renault, que se ofrecía en diferentes cilindradas, comenzando con 954 cc y aumentando hasta 1.360 cc en versiones posteriores. Este motor fue reconocido por su eficiencia y fiabilidad, características que contribuyeron a la popularidad del modelo.
El Peugeot 104 no solo jugó un papel crucial en la expansión de Peugeot en el segmento de automóviles compactos, sino que también sentó las bases para futuros modelos exitosos como el Peugeot 205. Aunque no fue un coche que acumulase numerosos premios, su impacto se mide mejor en términos de ventas y la huella que dejó en el mercado europeo durante los años 70 y 80.
El modelo es recordado por su robustez, simplicidad y por ser un precursor en la adopción del motor transversal en un coche de tracción delantera, una configuración que se ha convertido en estándar en el diseño de automóviles compactos.