Descripcion
El Seat Altea, introducido por la marca española Seat en 2004, representó un enfoque innovador en el segmento de los monovolúmenes compactos. Este modelo se desarrolló sobre la plataforma A5 (PQ35) del Grupo Volkswagen, compartida con otros vehículos del grupo como el Volkswagen Golf V, lo que le otorgó una robusta base técnica y una conducción dinámica.
El diseño del Altea fue obra del reconocido diseñador Walter de Silva, quien imprimió una estética moderna y aerodinámica que destacaba por su perfil elevado y su distintiva línea de cintura. Este diseño rompedor le permitió ganar en 2004 el premio al "Coche del Año en España", destacando su contribución al estilo contemporáneo de los monovolúmenes.
En términos de motorización, el Seat Altea ofreció una amplia gama de motores tanto diésel como gasolina, que variaban desde los eficientes TDI de 1.6 litros hasta los más potentes TSI de 2.0 litros, proporcionando una combinación equilibrada de rendimiento y eficiencia. La inclusión de tecnologías como el sistema de suspensión trasera independiente contribuyó a una experiencia de conducción cómoda y precisa.
A lo largo de su producción, que se extendió hasta 2015, el Altea se ofreció en varias versiones, incluyendo la Altea XL, con mayor espacio de carga, y la Altea Freetrack, con un diseño más orientado a la aventura y tracción total opcional.
El Seat Altea se destacó por su versatilidad y funcionalidad, convirtiéndose en una opción atractiva para familias que buscaban un vehículo compacto con características de un monovolumen. A pesar de que su producción cesó en 2015, el Altea dejó un legado significativo en el mercado europeo, siendo valorado por su diseño innovador y su capacidad de adaptación a las necesidades del conductor moderno.
El diseño del Altea fue obra del reconocido diseñador Walter de Silva, quien imprimió una estética moderna y aerodinámica que destacaba por su perfil elevado y su distintiva línea de cintura. Este diseño rompedor le permitió ganar en 2004 el premio al "Coche del Año en España", destacando su contribución al estilo contemporáneo de los monovolúmenes.
En términos de motorización, el Seat Altea ofreció una amplia gama de motores tanto diésel como gasolina, que variaban desde los eficientes TDI de 1.6 litros hasta los más potentes TSI de 2.0 litros, proporcionando una combinación equilibrada de rendimiento y eficiencia. La inclusión de tecnologías como el sistema de suspensión trasera independiente contribuyó a una experiencia de conducción cómoda y precisa.
A lo largo de su producción, que se extendió hasta 2015, el Altea se ofreció en varias versiones, incluyendo la Altea XL, con mayor espacio de carga, y la Altea Freetrack, con un diseño más orientado a la aventura y tracción total opcional.
El Seat Altea se destacó por su versatilidad y funcionalidad, convirtiéndose en una opción atractiva para familias que buscaban un vehículo compacto con características de un monovolumen. A pesar de que su producción cesó en 2015, el Altea dejó un legado significativo en el mercado europeo, siendo valorado por su diseño innovador y su capacidad de adaptación a las necesidades del conductor moderno.