Opel Ampera
Id marca:
53
Anyo inicio:
2011
Anyo fin:
2015
Descripcion
El Opel Ampera, presentado al mercado en 2011, fue el primer coche eléctrico de autonomía extendida producido por la marca alemana Opel, perteneciente al grupo General Motors. Este modelo compartía su plataforma y tecnología básica con el Chevrolet Volt, pero fue diseñado específicamente para el mercado europeo, integrando características y acabados que apelaban a las preferencias del público del continente.
El Ampera fue concebido como un vehículo innovador que combinaba un motor eléctrico con un generador alimentado por un motor de gasolina de 1.4 litros, lo que le permitía una autonomía total de aproximadamente 500 kilómetros, superando las limitaciones de los eléctricos puros de la época. Su batería de ion-litio de 16 kWh le ofrecía una autonomía eléctrica de entre 40 y 80 kilómetros, dependiendo de las condiciones de conducción.
El diseño del Ampera destacaba por su aerodinámica avanzada, un interior espacioso y un panel de instrumentos digital que proporcionaba información detallada sobre el consumo de energía y la autonomía restante. Además, incluía características de seguridad avanzadas para su tiempo, como airbags múltiples y sistemas de control de tracción y estabilidad.
La importancia del Opel Ampera en el mercado fue significativa, ya que representó un paso crucial hacia la electrificación del parque automovilístico europeo. En 2012, el Ampera recibió el prestigioso galardón de Coche del Año en Europa, lo que subrayó su innovación y relevancia en el sector.
A pesar de su éxito inicial, la producción del Ampera cesó en 2015 debido a la baja demanda en comparación con las expectativas y el alto coste de producción, pero su legado perdura como un pionero en la transición hacia vehículos más sostenibles.
El Ampera fue concebido como un vehículo innovador que combinaba un motor eléctrico con un generador alimentado por un motor de gasolina de 1.4 litros, lo que le permitía una autonomía total de aproximadamente 500 kilómetros, superando las limitaciones de los eléctricos puros de la época. Su batería de ion-litio de 16 kWh le ofrecía una autonomía eléctrica de entre 40 y 80 kilómetros, dependiendo de las condiciones de conducción.
El diseño del Ampera destacaba por su aerodinámica avanzada, un interior espacioso y un panel de instrumentos digital que proporcionaba información detallada sobre el consumo de energía y la autonomía restante. Además, incluía características de seguridad avanzadas para su tiempo, como airbags múltiples y sistemas de control de tracción y estabilidad.
La importancia del Opel Ampera en el mercado fue significativa, ya que representó un paso crucial hacia la electrificación del parque automovilístico europeo. En 2012, el Ampera recibió el prestigioso galardón de Coche del Año en Europa, lo que subrayó su innovación y relevancia en el sector.
A pesar de su éxito inicial, la producción del Ampera cesó en 2015 debido a la baja demanda en comparación con las expectativas y el alto coste de producción, pero su legado perdura como un pionero en la transición hacia vehículos más sostenibles.