Lancia Artena
Id marca:
48
Anyo inicio:
1931
Anyo fin:
1936
Descripcion
El Lancia Artena es un modelo de automóvil producido por la marca italiana Lancia, que debutó en el mercado en 1931 y permaneció en producción hasta 1936. Este modelo se sitúa en un periodo de transición para Lancia, en el que la marca buscaba consolidar su reputación de innovación y calidad en el ámbito de los vehículos de lujo. El Artena fue concebido como un coche de gama media-alta, dirigido a un público que valoraba tanto el diseño como la ingeniería de vanguardia.
El Lancia Artena fue presentado como un sedán elegante, disponible en varias configuraciones de carrocería, incluyendo berlina, coupé y descapotable. En términos técnicos, el Artena albergaba un motor de cuatro cilindros en línea de 1924 cc, que producía aproximadamente 54 CV, lo que le permitía alcanzar una velocidad máxima cercana a los 115 km/h. Este modelo destacaba por su avanzada suspensión delantera independiente, una característica poco común en la época, que otorgaba una conducción más suave y cómoda. Su sistema de frenos hidráulicos también era innovador, proporcionando una seguridad mejorada.
El diseño del Artena reflejaba la estética clásica de los años 30, con líneas elegantes y una parrilla distintiva que se convirtió en un emblema de la marca. Si bien no fue un éxito de ventas masivo, el Lancia Artena consolidó la reputación de Lancia como un fabricante comprometido con la calidad y la innovación técnica. Aunque no recibió premios específicos, su importancia radica en su contribución al prestigio de Lancia durante un periodo de cambio en la industria automotriz.
El Lancia Artena sigue siendo recordado por los entusiastas de los coches clásicos como un ejemplo de la excelencia en ingeniería y diseño de su época, y continúa siendo apreciado en exposiciones y colecciones de automóviles históricos.
El Lancia Artena fue presentado como un sedán elegante, disponible en varias configuraciones de carrocería, incluyendo berlina, coupé y descapotable. En términos técnicos, el Artena albergaba un motor de cuatro cilindros en línea de 1924 cc, que producía aproximadamente 54 CV, lo que le permitía alcanzar una velocidad máxima cercana a los 115 km/h. Este modelo destacaba por su avanzada suspensión delantera independiente, una característica poco común en la época, que otorgaba una conducción más suave y cómoda. Su sistema de frenos hidráulicos también era innovador, proporcionando una seguridad mejorada.
El diseño del Artena reflejaba la estética clásica de los años 30, con líneas elegantes y una parrilla distintiva que se convirtió en un emblema de la marca. Si bien no fue un éxito de ventas masivo, el Lancia Artena consolidó la reputación de Lancia como un fabricante comprometido con la calidad y la innovación técnica. Aunque no recibió premios específicos, su importancia radica en su contribución al prestigio de Lancia durante un periodo de cambio en la industria automotriz.
El Lancia Artena sigue siendo recordado por los entusiastas de los coches clásicos como un ejemplo de la excelencia en ingeniería y diseño de su época, y continúa siendo apreciado en exposiciones y colecciones de automóviles históricos.